El currículo de la educación obligatoria se ha considerado como el medio educativo por el que los ciudadanos adquieren la cultura básica y el conocimiento funcional, que les permitirán interpretar el mundo en el que viven, adaptarse al medio y participar en la toma de decisiones individuales y colectivas, para la mejora de la sociedad y la sostenibilidad medioambiental. En los sistemas educativos actuales, el currículo de la educación básica y obligatoria tiene como meta la adquisición y el desarrollo de las habilidades para la vida o competencias básicas, que fundamentan la autonomía personal, las relaciones interpersonales, el conocimiento funcional del entorno, el aprendizaje autónomo y la adaptación continua a la complejidad de las sociedades actuales.