Formato: Ebook | Las explicaciones teóricas sobre la comunicación han girado tradicionalmente en torno a grandes escuelas de pensamiento que son fruto de condicionantes de tipo histórico e institucional. Así, la diferenciación de Horkheimer o Lazarsfeld entre una teoría administrada estadounidense y una teoría crítica europea describe bien los rasgos constitutivos de las dos tradiciones teóricas que marcaron los inicios de la reflexión comunicacional. Por un lado, los aportes de la Mass Communication Research de Estados Unidos, que desde intereses científicos, pero también económicos y geoestratégicos, dieron lugar a una investigación centrada en los efectos y la capacidad persuasiva de los medios de masas. Por otro, el carácter más filosófico y menos empírico de la teoría crítica europea puso el foco en la cuestión de la ideología como elemento reproductor del statu quo, temática a la que años más tarde contribuirían los trabajos del estructuralismo francés o los estudios culturales británicos, al incidir en el estudio de la reproducción de los mensajes y en los procesos de recepción de las audiencias, respectivamente.